Uno de los efectos que proporciona la
práctica del yoga, es que libera de la manipulación y
limitación que ejercen sobre el individuo lo que llamamos gobiernos,
tradiciones, valores sociales, etc., y del aturdimiento y alineación
generado por el bombardeo continuo de los “aparatos de la
información y de la propaganda”, al servicio de un sistema
dirigido por una mayoría de personas que están demostrando poseer
un nivel de consciencia muy bajo y que casi siempre obedecen a
oscuros intereses de partidos o pequeños grupos.
La práctica del yoga “desrobotiza”
y desprograma los condicionamiento provocados por todo tipo de
ideologías impuestas al ciudadano indefenso por el medio social en
el que habita. El yoga, lo mismo que otros sistemas de
conocimiento holístico, ayuda a ver la verdadera realidad y a ser
“uno mismo” y no un ser despersonalizado, manipulado por las
jerarquías y los poderes de turno, públicos o privados. El futuro
de todo practicante de yoga es la plena expansión de su
consciencia y la libertad real, que está asociada a una mente sin
prejuicios, ataduras o condicionamientos.
El yoga es una revolución total que
empieza por uno mismo. Un proceso de crecimiento que desarrolla la
inteligencia creativa de la persona y orienta su vida hacia una
actitud de servicio a sus semejantes. A veces se le ha tachado
injustamente de ser un procedimiento netamente individual y egoísta.
Nada más lejos de la realidad. La conciencia que desarrolla el
practicante desemboca en actitudes sociales, pero desprovistas del
interés por obtener contrapartidas personales. Despierta una
verdadera consciencia social de unidad y solidaridad que va más allá
de los nacionalismos y de cualquier tipo de discriminación por razón
de raza, sexo, cultura, ideología, religión o posición social.
Recupera la auténtica dimensión del ser humano, una perspectiva
global donde se deja de vivir como un individuo aislado o en un
modelo de sociedad concreto, y se siente a la humanidad y al planeta
Tierra como un Todo, un mismo organismo viviente en el que cada una
de sus células ejerce su misión para que se realice la finalidad y
el propósito de la existencia.
OM SHANTI (OM PAZ)
“Claves del yoga: teoría
y práctica” de Danilo Hernández.